¿Qué esquema debe seguirse para la toma de decisiones sobre productos o servicios financieros?
Dados los múltiples productos existentes en el mercado, la complejidad de algunos de ellos así como el elevado número de entidades financieras autorizadas para ofrecerlos, a la hora de contratar el servicio o producto financiero que más se adapte a las circunstancias del usuario, resulta conveniente seguir el siguiente esquema de actuación:
- Determinación de la necesidad financiera concreta: si bien existen multitud de decisiones financieras, éstas pueden englobarse, en un amplio contexto, como sigue:
- Materializar un ahorro.
- Efectuar pagos.
- Disponer de dinero en efectivo.
- Realizar un cambio de divisas.
- Obtener recursos a crédito.
- Obtener una garantía frente a terceros.
- Cubrir determinadas situaciones de riesgo.
- Identificación de las entidades financieras que pueden ofrecer productos o servicios para atender esa necesidad concreta. Ej.: entidades de crédito, empresas de seguros, auxiliares financieros, etc.
- Elección del producto financiero concreto, distinguiendo si se trata de una operación ocasional (ej.: una orden de pago) o de duración prolongada en el tiempo (ej.: préstamo hipotecario).
- Análisis de las características particulares del producto financiero finalmente elegido, incluyendo los costes asociados al mismo y su fiscalidad.