El término genérico de transferencia comprende tanto las transferencias propiamente dichas como los traspasos.
El término “transferencia bancaria” suele hacer referencia a movimientos de fondos entre cuentas abiertas en entidades de crédito distintas o entre cuentas abiertas en la misma entidad, pero pertenecientes a distintos titulares; un “traspaso” se refiere a un movimiento de fondos entre cuentas abiertas en una misma entidad y referidas a un mismo titular.
En los traspasos no se suele cobrar comisión alguna por la entidad de crédito y es una orden que se hace efectiva inmediatamente. Por su parte, en las transferencias suele cobrarse comisión, haciéndose efectiva la orden inmediatamente, en caso de que las cuentas de origen y destino pertenezcan a la misma entidad, o al día siguiente si se trata de un trasvase de fondos entre cuentas de distintas entidades, aunque los llamados pagos instántaneos están permitiendo acelerar estos plazos más todavía.