La Ley 26/2014, de 27 de noviembre, modificó la Ley 35/2006, de 28 de noviembre, del Impuesto sobre la Renta de las personas Físicas, de tal manera que las ganancias patrimoniales derivadas de renta variable pasan a tributar en la base del ahorro, con independencia del periodo de generación de las mismas, por lo que la antigüedad de la inversión no se tendrá en cuenta para las ganancias patrimoniales generadas a partir del 1 de enero de 2015.

Sin embargo, para las ganancias patrimoniales derivadas de activos de renta variable realizadas en el ejercicio 2014, la tributación de las mismas se integrará en la base del ahorro del IRPF si el periodo de generación de la ganancia patrimonial ha sido superior al año. Si el periodo de generación de la ganancia ha sido inferior a un año, la ganancia se integrará en la base general del IRPF, tributando a su tipo marginal.